Mis miedos son horrorosos, a veces me paralizan, otras veces me hacen tomar decisiones dolorosas -contrarias a mi misma incluso- y muchas veces me hacen perder vida o situaciones de vida que disfrutaría enormemente si no existieran.
Supongo es normal tenerlos pero no por ello los tolero.
Por momentos trato de vencerlos y me meto a luchar contra ellos.
Aunque a veces creo que tal vez debería dejarlos así y por lo menos no me traumatizarían tanto y no les otorgaría tanto poder sobre mí.
El otro día hice una cosa que cuanto mas lo pienso mas me asombra…
Algo que me da mucho miedo es el mar…
Me encanta, lo defiendo, lo protejo, lo admiro, me enamora … pero aun así me da miedo.
Con todo, me subí a una tabla y vencí el vértigo de lo que es meterse mar adentro de verdad.
No iba sola sino con alguien que nada mejor que un pez y me generaba mucha confianza tenerlo cerca, pero aún así era yo quien iba sobre esa tabla y avanzaba.
Cuando pise la arena, además de sentirme realmente floja, me sentí orgullosa por vencer una paranoia y haber disfrutado con mi adrenalina a pleno de un momento maravilloso.
Tengo una lista gigante de miedos de muchos colores.
Ojalá tuviera valor para uno a uno poder ir rindiéndolos a mi…
Ojalá hubiera una receta mágica que me ayudara en ese camino…
Ojalá pudiera sentirme más orgullosa de mi misma en más oportunidades por el afán de evolucionar, de crecer, de ir mas allá de lo que me obstruye hacia lo que me engrandece.
No quiero perder el encanto de vivir por mis miedos.
Tampoco quiero aprender a vencerlos cuando sea viejita y me arrepienta de lo que no hice o de lo que ya no pueda hacer porque me pasaron las oportunidades o el estado físico, o los amores, o la vida…
No se ni cómo ni cuándo pero quiero vencer mis miedos cuanto antes …
Los miedos paralizan es verdad… y qué bien que se siente cuando los vencés!! Me encantó Bic!
Gracias.
Besos