Es un hábito, una necesidad, casi una obsesión …
Digamos no quedo tranquila hasta que lo hago, jamás saldría de la casa con la sensación de dejar las cosas en su lugar si lo obviara … para ser muy franca no puedo ni sacar a mi perro a pasear sin hacerlo antes.
Pero hoy me revelé … no lo hice … no porque me gustara no verla ordenada, tampoco porque pretenda de ahora en mas no hacerlo, sino como un mero desafío hacia mí misma … para demostrarme que soy más fuerte que mis rutinarias costumbres.
Y corroborar que tanto yo como el Mundo continuamos nuestro rumbo sin mis manías ni prejuicios.