Entiendo el concepto, la idea la comparto, me parece fenomenal.
Trato de seguirla, más aún me resulta esencial en mi dinámica el fomentarla.
Pero es difícil, no es fácil … un ser cerebral y precavido cómo hace para desprenderse de la idea del futuro?
…
Me lo sugirió una amiga cuando cambié abruptamente mi forma de vivir.
Me lo auto-recuerdo cuando necesito el shock del «hoy».
Esta mañana recibo un correo de un conocido cuya madre está luchando por su vida en el CTI, me dice «Es una historia del día a día» … y yo solo pienso por qué los «sanos» hemos dejado de vivir las historias así transformándonos en «enfermos» del tiempo y las inexistentes proyecciones que solo impiden vivir el día a día por temor o cautela al futuro.