Hablaba con alguien que no tiene hijos… quien me decía que tenerlos era un gran trabajo.
Me quede pensando en eso…
Tener hijos y criarlos significa entre otras cosas… velar por ellos, ponerles limites, no dormir si tenes sueño cuando tienen algún problema, llevarlos a clases, cambiar de planes, procurar su higiene y su alimentación… en fin… una serie enorme de situaciones…. pero que no es trabajo… es dar amor y recibir amor.
Y muy especialmente tener hijos representa preparase para el desapego más grande de la vida, porque tal como dicen los proverbios uno debe darles raíces y alas… y un día los hijos volaran por su cuenta dejando el nido.
Tener hijos nos hace ser menos egoístas y nos regala cuando son pequeños la dulzura más grande de este Mundo, esa mirada de confianza depositada en nosotros sin la más mínima duda de que no les vamos a fallar y que somos sus Soles en la vida.
No, no, no… tener hijos no es un trabajo, mucho menos un sacrificio… es verdad se dejan de hacer cosas por ellos y se deben de hacer una cantidad de otras cosas también por ellos… pero es el acto de amor más grande y puro uno puede realizar en esta vida si se lo toma en serio.