Provenía de un bosque encantado, me lo había regalado su custodio para un cumpleaños … cuando llegó a casa media apenas un centímetro.
Con el tiempo creció pero nunca despego.
Formaba parte de mis valores tangibles … lo que quiero y me acompaña.
Pero a principios de año, cuando me mudé, me dolió ver que de un día para otro cada día iba a peor.
Se lleno de bichitos negros, sus hojas estaban agujeradas, perdió color, hormigas iban y venian por su cuerpo, dejo de crecer por completo y empezó a declinar.
Lo cambié de lugar varias veces pero iba más en baja …
Un día agarre la tijera y decidí cortarlo … lo rape por completo … incluso vi que su tronquito casi no tenia vida … tentada estuve de sacarlo de mi jardín pues algo sin vida no me gusta permanezca conmigo.
Pero por esas cosas misteriosas uno hace -incluso diferente a como suele hacer siempre- no me deprendí de él.
Y lo cierto es que de un día para otro, de la misma manera que menguó, empezó a crecer y lo que se ha desarrollado en estos meses jamás en los años anteriores lo había hecho.
Sus hojas son fuertes, bien verdes y enormes, son muchísimas … su tronco esta firme como nunca.
Ahora me pregunto incluso que haré con el … pero por otra razón … porque en una maceta un árbol de su magnitud no puede continuar …
…
Los ombúes siempre desde que los conocí me transmitieron algo …. algunos permanecerán en mi memoria para siempre: el «primero», un bonsai viajero, los de Sevilla (uno gigante en La Cartuja, los que estaban a orillas del Guadalquivir, los que asomaban de los jardines del palacio de la Infanta), el que se veía desde mi cama en una casa en la que viví … otros se encuentran en mi vida diaria: el que está situado a dos cuadras de casa y toco cuando paso en bici por allí), «éste» …
Sí, «este» … el cual me ha enseñado que a veces solo tocar la muerte permite revivir con fuerza y me esta haciendo ver la necesidad de soltar/desprenderme de algo querido para permitirle crecer.
tal cual….a veces es cuestion de solo esperar..otras hay que podar las ramas podridas…en la natrualeza estan todas las enseñanzas…ahora…a veces hay que saber cambiar de recipiente, a mi me paso con unas palmeras que me encantan que las tuve por decenas en macetas..y de alli no despegaban…las que trasplante luego a tierra pura, pegaron el tal estiron y fueron lo que querian ser. ¿ conoces el monte de ombues de Valizas?