Hay pozos profundos, otros coloridos, otros llanos, otros grises…
Otros anchos, otros angostos…
Algunos insertos en feas calles, otros en esplendidas praderas…
En algunos está repleto de huéspedes, en otros no tantos.
Hay pozos de agua cristalina, hay pozos de agua estancada, hay pozos de agua contaminada.
…
Y hay sapos para cada pozo, o mejor dicho cada sapo tiene su pozo idóneo.
Y yo soy una sapa que no le gustan los pozos oscuros, repletos de sapas con mascaras de mucha pintura, y sapos engatusadores.
Puede sea una sapa en extensión, o tal vez no… pero me van los pozos marinos, de aguas cristalinas, que se iluminan de día, con pocos seres dentro a “cara lavada”.